Cisnes negros, rinocerontes grises y serpientes de cascabel

Aunque muchos saben lo que es un cisne negro, menos a que nos referimos por rinocerontes grises, y muy pocos qué queremos decir con serpientes de cascabel.

Lo que seguro casi nadie se detiene a analizar, es en cómo utilizarlos.

Hoy te cuento cómo el entendimiento de estos conceptos, más allá de la simple definición, puede ser útil.

El “cisne negro”, término acuñado por Nassim Taleb en 2007, hace referencia a un hecho que cumple con las siguientes condiciones:

  • Altamente improbable
  • Con consecuencias desastrosas
  • Inimaginable a priori
  • Explicable con retrospectiva

Y aquí está uno de los puntos fuertes de los que poco se habla, no es necesario cumplir solo con las dos primeras premisas, es imprescindible que se cumpla con las cuatro.

Fíjate que con esto puedes diferenciar entre:

  • Los atentados de las torres gemelas (cumple con los 4 preceptos)
  • La pandemia de COVID. Solo cumple con los dos primeros, porque era imaginable y explicable.

¡¡¡Cambiemos de animal!!!

Imagínate ahora un “rinoceronte gris”. Grande, imponente, desafiante, "obvio".

Pues bien, Michelle Wucker, en el foro de Davos de 2013, expuso este término para referirse a aquellos escenarios futuros de los que tenemos señales obvias de su segura ocurrencia y para los que de forma generalizada no se hace nada.

El cambio climático es un enorme rinoceronte gris.

La idea de estos escenarios/eventos es que las señales son enormes, y las respuestas casi inexistentes.

Seguro que más de uno cuando pierda un hotel en la Costa Este de Estados Unidos por una subida repentina del nivel del mar, se atreverá a decir que ha sido un cisne negro.

Hasta aquí, lo inimaginable y lo evidente.

¿Pero qué pasa con todo aquello que, no siendo inimaginable, tampoco es tan sumamente evidente?

Pues precisamente es en lo que realmente más puedes trabajar como gestor de riesgos.

Y para este conjunto de eventos, hemos acudido a la “serpiente de cascabel”.

Estás caminando por el desierto de Sonora, no es inimaginable que te encuentres con una serpiente de cascabel. Parece también claro que, si te muerde, las consecuencias son desastrosas.

Como serpiente, no la ves de una forma tan evidente como verías un rinoceronte, ¿Verdad?

Pero a diferencia de los cisnes negros, si escuchas, si prestas atención, puedes llegar a localizarla con suficiente antelación. Sus señales quizás son sutiles, pero suficientes para aquel que escucha.

En resumen, los cisnes negros no puedes identificarlos a priori, recuerda que son hechos inimaginables. Eso sí, puedes prepararte para las consecuencias de eventos inesperados. Es decir, da lo mismo qué lo haya causado, si un meteorito o un dinosaurio extinto, pero si fallan los servidores debes estar preparado para seguir operando y prestando servicio.

Los rinocerontes grises son tan evidentes que no hay nada que identificar. Gestionar rinocerontes grises es gestionar concienciación y cultura de riesgo. Gestionar rinocerontes grises es, sobre todo, gestionar "parálisis por impresión".

Cuando el problema es muy grande divídelo en trozos.

Y finalmente, los gestores de riesgos trabajan buscando serpientes de cascabel por doquier, escuchando, atentos a lo que sucede dentro y fuera de las empresas donde laboran.

Ahí está el verdadero valor utilidad de la gestión de riesgos.

Desde Seguros-CR agradecemos a Sergio Simón escritor de este articulo y Prof. De Ealde.